Efectos del Aloe Vera Arborescens en las Dermatitis
El Aloe Vera Arborescens, aunque menos conocido que el Aloe Vera Barbadensis (la variedad más usada comercialmente), también posee propiedades medicinales muy beneficiosas para la piel.
Ayuda a reducir la inflamación típica de las dermatitis (enrojecimiento, hinchazón y calor).
Actúa inhibiendo mediadores inflamatorios como prostaglandinas y citocinas.
Estimula la regeneración celular y la cicatrización de heridas o lesiones cutáneas.
Puede acelerar la recuperación de piel dañada por dermatitis de contacto, atópica o seborreica.
Su mucílago (gel interno) es rico en polisacáridos que ayudan a retener agua en la piel, evitando la sequedad común en muchos tipos de dermatitis.
Inhibe el crecimiento de bacterias y hongos que pueden empeorar los cuadros de dermatitis (por ejemplo, infecciones secundarias causadas por rascado constante).
Aunque la mayoría de los estudios clínicos se han realizado con Aloe Vera Barbadensis, existen evidencias similares con Aloe Vera Arborescens, especialmente en:
Cicatrización de quemaduras y lesiones.
Tratamiento de eccema y psoriasis leve.
Dermatitis de contacto por irritantes químicos.
Un estudio comparativo mostró que el Aloe arborescens contiene incluso más compuestos antioxidantes que el barbadensis, como aloína, emodina y acemanano, que ayudan a reducir el estrés oxidativo cutáneo.
Utilizar solo el gel interno de la hoja, nunca el látex (parte amarillenta entre la cáscara y el gel), ya que puede causar irritación.
Probar siempre en una pequeña zona de la piel antes de aplicar en áreas afectadas por dermatitis, ya que incluso las plantas medicinales pueden causar reacción.
En casos de dermatitis crónica o infecciosa, usar únicamente como complemento del tratamiento médico, nunca como sustituto.